viernes, 28 de noviembre de 2014

lloviendo

Lloviendo, si y mucho, de esos días en los que quedarme en casa a leer, escuchar música, hacer punto, ver la tele y/o escribir viene siendo lo que más apetece.

Pues va a ser que me espera una tarde bien ajetreada. Y digo yo, para qué me meteré en camisas de once varas? Si en estando a puntico de ser bisabuela lo que me tocaría son las sopitas y el buen vino, cagoentó.

Claro que ya intento de vez en cuando ser "normal" y... me muero de asco. 

Día llegará en el que tendré que dedicarme a "mis labores". Mientras tanto aprendo y comparto todo lo que puedo. 

Las conversaciones con buenas personas siguen siendo un aliciente en mi vida. 

Ayer mismo tuve el placer de conversar con dos buenas amigas, una recuperada de hace muchos años y la otra nuevecita.

Jopeta, qué suerte tengo con las personas que me voy encontrando en el camino, algunos alguienes son un regalo. 



Hablando de amigos, he recibido un regalazo de uno de los buenos, un detalle inesperado que me provoca una emoción agridulce y tierna. Hay como hilos invisibles que nos conectan, entre nosotros y hacia el infinito. Tenemos buenos maestros que nos animan a seguir con nuestros proyectos, despacito y con buena letra, optimizando los escasos recursos materiales y el gran capital humano. 

He ido escribiendo a ratitos, a lo largo del día, os cuento que la tarde ha resultado interesante y que... me voy a dormir que mañana estamos de cumpleaños. Ah si y que gracias, gracias, gracias... eso es todo amigos!


Felicidades Jaume, eres un tío grande, tanto que estás a punto de ser tío-abuelo


No hay comentarios:

Publicar un comentario