jueves, 26 de septiembre de 2013

agradecimiento

Sentir agradecimiento es una cosa buena, es como que se te llenan los pulmones de un aire suave y te aparece una sonrisa leve, instintiva.


Estos días he recibido muchos regalos de vida, de personas cercanas, de amigos lejanos, de conocidos y también de desconocidos. Desde detalles pequeños hasta acciones "multitudinarias". 


Agradezco lo que parece enorme y me quedo con las pequeñas grandes cosas:


La sesión chachi de "bicing". Cenar en familia con infinidad de risas. El precioso ramo de flores para mi chiquis. Subir a Vallter a esperar a los valientes, ver a nuestro amigo entrar con la capa. Encontrar aquel rinconcito especial para merendar recordando. Cenar con amigos entrañables en la casa de siempre. Pasar la mañana del domingo paseando en carro por La Fageda, al llegar encontrar un mega-aperitivo casero amical... Y al volver a casa recibir aquella llamada aplazada en exceso y que me reconforta el alma.


Todo esto en nuestra escapada anual a La Garrotxa, todo ello por y para asistir a la Marxa 100% Tondo, la que los amigos de Olot organizan de forma admirable como homenaje a nuestro Xavi.



Vivir la dedicación de los organizadores, los voluntarios, los participantes, los colaboradores. Reconocer las caras que ya nos van sonando, devolver los saludos con una gran sonrisa, saludar y conversar en ese reencuentro agradable, con aquellas personas que sólo ves allí... 


Agradecimiento y resaca, resaca de tantas emociones y recuerdos, resaca y gratitud por tanto cariño... 



Va por ti, por tu eterna sonrisa azul, y porque hoy también te quiero.

martes, 17 de septiembre de 2013

Importancia

A veces me siento como que desencajo,  os pasa a vosotros?
Que mis ideas, criterios, actitudes, pensamientos... son tan dispares a la mayoría que me siento como de otro planeta.

He decidido dejar de ponerme de los nervios. Hace casi 28 meses me cambió absolutamente la percepción de casi todo, de lo que para mi es importante y lo que carece de importancia. De las personas por las que vale la pena arriesgar y de las que para nada. De las cosas por la que quiero esforzarme y las que me importan un carajo. 

Sin ser tan radical, incluyendo las medias tintas, pero básicamente eso, separar lo que es de verdad de lo que es de plástico. Esto es a veces incómodo y al mismo tiempo bastante práctico. 
Me niego a volverme desconfiada, simplemente me muevo bastante por intuición, asumiendo la responsabilidad de mi propia vida, si acierto bien y si desacierto pues aire. (De vez en cuando me la dan con queso).

Como os decía un poco más arriba, abandono la sensación de nerviosidad, de histeria. Conservando casi intactas las emociones, los sentimientos, los ideales, los objetivos, las ilusiones... desde otro ángulo, desde otra perspectiva. 

En ello estoy, ya veremos hacía donde me lleva todo esto. 
Me seguiréis acompañando? 

Ah, por cierto que muchas gracias por lo de que bonico y tal... 

viernes, 13 de septiembre de 2013

empatía

Hoy me cuestionaba cómo podemos ser empáticos, es decir ponernos en la piel de otros, sin haber vivido lo que ellos están viviendo. Significa ello que para practicar la empatía tenemos que ser unos machacados de la vida?

Definición oficial de la palabra empatía: Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro.

Sea como fuere para poder empatizar, dado el caso, primero debe uno darse cuenta de que al otro le está sucediendo algo empatizable, y cómo se hace? pues muy sencillo, podemos comprobarlo si sabemos escuchar, si observamos la expresión emocional, a  través del lenguaje corporal y si aplicamos una miaja de capacidad de comprensión... entonces se trata simplemente de estar ahí, escuchando, observando, acompañando... sin juzgar ni aleccionar. Ofrecer nuestra escucha activa acompañada de nuestra mejor sonrisa... :) (para todo esto es imprescindible ser persona).

Claro que también podemos aplicar la empatía en situaciones estupendas y ser del tipo positivo, aunque me da que en los momentos happy  al igual ni falta que hace, o tal vez si?. 

Cuidado! Aprender a empatizar y aplicarlo puede mejorar nuestra calidad humana... ;)

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Pareja

Me preguntaba a mi misma por qué me gusta tener pareja, pues es muy fácil: me encanta la sensación de tener una relación especial, ese calorcito en el alma, cogerse de la mano, mirarse a los ojos, sonreír. Sentir que la soledad, esa soledad que llevamos todos puesta, es menos solitaria.

Soy capaz de auto-abastecerme, me desenvuelvo bien en las cosas cotidianas de la vida. (Vamos que llevo muchos años al cargo de mi intendencia). Entonces, para qué necesito una pareja? Necesitar es desear? Es un deseo necesario? Pozi, desde la libertad, deseo una pareja adecuada simplemente para ser un poco más feliz.

Mi vida es bastante aceptable. Me siento afortunada por “tener” personas estupendas como una gran familia, amigas y amigos... si añado una pareja ya será la leshe. Tengo proyectos, inquietudes... (como por ejemplo volver a tener un trabajo remunerado).

Me viene apeteciendo un montón volver a sentir esas cosquillas en el corazón, una pizca de ternura, un aliño picante, rozar... un roce que incluya esa complicidad tan añorada, esa que te hace aparcar el mundo para tomar aire, respirar, sentir. Un regalo para los sentidos, como un recreo para sumar vida.

Y si, también me mola incluir al ser estimado en los eventos, dejar de ser la “sola” re-divorciada de la family y los amigos. Por qué? Pues porque alguien me lo ha recordado (después de 7 años sin) en una relación tan fugaz como vital y me ha confirmado mis sospechas... me gusta tener pareja!! 

Sin sentirme tonta, dependiente, ni mojigata... ir algún rato por la vida con cara de pava y risa floja, jeje.

Qué maravilla después de tanto dolor recuperar algo de ilusión y afirmar en voz alta que quiero ser feliz, que merezco serlo y que mi gente disfrute con mi felicidad y así de paso darles un poco de tregua.

Sin prisa pero sin pausa, me abro de nuevo al amor y confío en encontrarnos.