jueves, 10 de octubre de 2019

Calimera

De pronto es como si algo dentro de mi me recordara el dolor, se activa alguna tecla interna que me susurra, astutamente, que Xavi (y mi padre, y Juan, o mi madre, Ramon, Josep Ma...) está/n muerto/s. Cómo si se me pudiera o pudiese olvidar!.

Sin embargo viene siendo lo contrario a la cotidianidad, esa en la que he aprendido a vivir sin él, sin ellos, siendo capaz de sonreír, de ser feliz, de honrarles desde la alegría y los buenos recuerdos. De hecho son parte de mi motor para seguir adelante, junto con todos vosotros, los vivos, en una especie de armonía casi mágica.

Por supuesto con mis (y sus) luces y sombras, con altibajos, momentos de bajón, como también de auge. Ya os conté que estos días los acontecimientos me han colapsado, pero confío en que todo se arregla y vienen días mejores, de hecho ya los veo asomando por el horizonte.

Entonces, por qué se despierta en mi ese duelo profundo?, Ah si, calla, será que se van solapando las situaciones? El caso y la cosa es que vuelvo a tener ganas de llorar, sin más, del propio llanto. Sí, ese que va saliendo, por ejemplo cuando miro las fotos de una amiga feliz con su pareja, o de esos amigos entrañables que hoy cumplen tropomil años de casados, queriéndose y eso. 

Me digo a mi misma, pero a ver, bonita, si hace un ratín estabas entusiasmada haciendo los deberes del curso (estoy estudiando online) y ahora te vuelves a poner calimera??. Será posible? Bueno, tal vez estar otra vez encontrando nuevas personas a las que cuidar, seguir añorando el recreo (a ratos), el coche escorromoñao en el taller... tengan algo que ver con el tema. 

Y para colmo sólo se me ocurre a mi ir a dar sangre (es lo que tiene ser donante) y levantarme de la camilla antes de tiempo para llenarlo todo todito, oye qué roja es así vista, esparramada en el suelo, en mi ropa, en los ojos de susto de los auxiliares. 

(Gracias por atenderme).


Ahora que os cuento esto me viene esa famosa sonrisa arco iris, 
producto de juntar lágrimas con gesto de "ni tan mal". Es bien.





domingo, 6 de octubre de 2019

Otoño



He estado unos días tan cansada que ni pa salir de casa tenía ánimo. Andaba como una zombi. Me planteé: O adelanto la hibernación o me vuelvo a echar la toalla al hombro y me lanzo al agua!. Qué se hace cuando se tiene frío y calor al mismo tiempo?. Si, ya sé, lo llamamos otoño y es una cansinez.

Os pasa que cuando se juntan varias cosas potentes se os acaban las pilas?. Pos a mi sí, mismamente. Mayormente sucede cuando se joden un puñao de piezas al mismo tiempo, tanto físicas como emocionales y/o materiales. Entonces me quedo un poco a la deriva, como en tierra de nadie.

Ni ganicas de llorar, ni de hablar (sorry sister). Y eso que vinieron mis churumbeles a comer. Y que la otra tarde tenía una actividad interesante, pero ni por esas, me dormí una peli medio mareada esperando que fuera hora de nocturnidad y sueñación. Por cierto, menudos sueños rarunos las últimas noches... Esas añoranzas profundas que asoman la nariz para recordarme que respire.

Me recuerdo a mi misma que todo es temporal, que ésto también pasará, que estamos en vías de solución, que la vida sigue, que si me caigo me vuelvo a levantar y todo eso que me chiva mi pepita grilla interna. Confiar es bien.

Y aquí me tenéis, ante mi pc, por fin arreglado, escribiendo unas parrafadas para re-conectar con el mundo mundial. Personas humanas, seguís ahí, al otro lado del teclado y el monitor?. Si es así, gracias.

Suerte que sigo viva, compartiendo vivencias con los seres estupendos que voy encontrando en mi camino, algunos son tan temporales que pasan de forma fugaz, otros seguimos aprendiendo y disfrutando juntos. Gracias! Ya estoy muchomásmejor



Voy estando en modo activo, recuperando una miaja las ganas de sonreír, 
el resto, ya sabéis... lo vamos viendo.