domingo, 26 de febrero de 2023

ojo

Últimamente se ve que lloro poco, entonces mis ojos van a su aire. Vuelven a estar irritados, enrojecidos... y las lágrimas van por libre. Puedo estar viendo una serie, haciendo punto (en plan relax) y que salgan en cascada, sin más.

Cómo se hace para llorar sin venir a cuento?. Hay que marcarse un calendario llorístico?.  Ustedes vosotros os programáis el llanto?. A ver si va a ser lo que me decía mi padre, que vamos haciendo callo (tal vez por callar).

Estos días han sido intensos, me comunicaron dos fallecimientos de personas conocidas (ex-amigas). Tuve una mini-crisis personal porque sus muertes me dejaron fría pero el recuerdo de lo vivido me removió. Cosas de vida. Me sigue sorprendiendo la sorpresa de la gente ante la muerte, te lo explican como lo nunca visto, como un hecho inaudito... Nos vamos enterando de que nos vamos a morir todos???.

En mi caso, ni ganas ni miedo de morirme, oiga. Sin prisa pero sin pausa. 

Total que después de ello llegó el finde de la social XTV. Aparentemente cada año estoy más tranquila, sobre todo porque el equipo organizativo, mis compis, son unos trabajadores incansables, preparando todo a conciencia para que las y los ciclistas encuentren una ruta atractiva, segura y adecuada. Siempre, por supuesto, en honor y homenaje a nuestra sonrisa infinita.

Pues bien, acudo a realizar mi pequeña aportación al evento. Compruebo la generosidad de nuestros voluntarios. Paso la mañana en buena compañía. Confirmamos que las dos caídas, afortunadamente, parecen leves. Acaba la carrera y llega la entrega de trofeos, nos saludamos los entregadores y felicitamos a los ganadores. Todo en orden.

En el momento de la foto final el speaker, con todo su cariño, nos dice que levantemos un dedo señalando al cielo para dedicárselo a Xavi... Es bien. Allí voy yo levantando mano, brazo y todo mi ser, apuntando al firmamento.

Uff... Menos mal que llevaba mis molonas gafas de sol. Ahí sí que salió mi llanto, suave, ese que sale del fondo, esa sensación momentánea de conectar desde las entrañas (sin querer evitarlo).

Gracias, mil gracias. Me quedo sin palabras para agradecer. 

  (esto lo escribí hace 20 días)


jueves, 2 de febrero de 2023

secretos

Secretitos al oído son de vieja (algo así se decía cuando era chiquis). 

Todos tenemos secretos, aunque unos sean de andar por casa, algunos inconfesables y otros un secreto a voces. La verdad es que confiar en que nos guarden las confidencias, con confianza, es un asunto delicado. Al igual que cuando nos cuentan cosas que preferiríamos seguir sin saber.

A veces puede cambiar nuestra imagen, propia y ajena, cuando somos sabedores de ciertas noticias. Nos inculcan aquello del respeto y la empatía, evitar juzgar y todo eso, pero es lo que tiene ser seres humanos, imperfectos e impredecibles.

Guardar información confidencial? Básico. De primero de secretismo. Porque la tentación de: me han dicho que... pero yo ni te lo he dicho... que no se puede decir...  Es sólo superada cuando inicialmente te callas, luego te autorizan a contarlo y... la otra persona ya lo sabía! Se te queda una cara como de Pokémon.

El caso y la cosa es que guardar intimidades, siempre que no nos hagan callo en las entretelas, pues ni tan mal. Compartir lo compartible también ayuda a gestionar cosicas de esas intensas. Siempre que encontremos la compañía que acompaña, sin más, sin menos.

Ay! Si yo os contara! Pozi, tengo cuarto y mitad de secretación, reservada para los más reservados. Que luego también los hay que se escandalizan si comparto temas poco usuales, "los trapitos sucios se lavan en casa". Menudo atrevimiento, ir  por ahí contando sentimientos, emociones, vivencias. Cachis!.

Vivimos en una sociedad absurda en la que explicar una miaja de ti mismo  escandaliza, al tiempo que una ingente gente se deleita con las memeces de los famosillos de turno. Como si ello fuera o fuese importante. 

Si nos cuidásemos de cuidar y cuidarnos, propia y mutuamente, sin tantos remilgos ni recovecos quizá llegásemos a eso que está tan de moda: "la verdad", pero la verdadera. Nos atrevemos?

Feliz año, feliz vida... seguimos para bingo. Es bien?.

(esto lo escribí hace un mes 😊)