lunes, 20 de enero de 2014

Albert

Un año Albert, cagoentó :(

Siempre nos quisimos, al menos eso quiero creer, aunque yo era la cuñada coñazo, la cansina, y tu el rebelde sin causa, el eterno niño grande. (Aún recuerdo aquel día tan difícil, para los dos, en el super).

Además del dolor la sensación de rabia nos acompaña. Quien iba a pensar que nunca más te despertarías

Cómo me hubiera gustado conocer a "tu" Ana contigo, haber compartido vida con vosotros, saber lo felices que eráis antes de dejar de serlo.  

La vida es tan temporal y nosotros tan confiados que pensamos que esas cosas les pasan siempre a los demás. Acaso pensamos que somos diferentes?

Todos venimos siendo simples personas de a pie. La muerte de Xavi nos dejó tan noqueados que pensamos que ya, que con él ya había bastante.

Tus hermanos perdieron a su madre siendo chiquis, l'àvia Maria, la matriarca que nos protege a todos, de la que tu sobrino siempre llevaba la foto. Después l'avi (vuestro padre), la tieta Teresa, nuestro Xavi... y la verdad es que ya había suficientes duelos... demasiado dolor. Entonces te fuiste tu, jopeta ya vale!.

Cómo me gustó verte aquel día por la calle, tan feliz con tu hijo, llevando el carrito de la compra, tan sonriente, tan "normal".

Qué contenta estoy de haber compartido la sopa de tu hermana, la cálida cena del día de Navidad, con ella, con nuestro cuñado, contigo, con tu hijo, con alguno de los míos.

Mi propósito sigue siendo decir los te quiero clarito y a la cara, seguir aprendiendo a vivir, mientras la vida me permita estar viva. 



Un abrazo enorme... y un capón!

(Por supuesto todos escuchamos de vez en cuando a tu Elvis, a mi me encanta).


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