Ser amable sin falsedad, sin trampa, desde la sinceridad y el respeto hacia nuestros interlocutores, simplemente porque ya hay mucho antipático suelto por el mundo. Sin confundir cordialidad con hipocresía, desde la sencillez.
Nos hemos acostumbrado tanto a ser competitivos, a mostrarnos fuertes e invencibles, a esconder nuestra fragilidad, a exigirnos y exhibirnos tanto de cara a la galería... que olvidamos que la vida es otra cosa.
Es tan intangible que se nos escapa de las manos. Porque ser sensibles y empáticos equivale socialmente, como mínimo, a ser raro.
Es tan intangible que se nos escapa de las manos. Porque ser sensibles y empáticos equivale socialmente, como mínimo, a ser raro.
Vemos a alguien afable y es como si perdiera puntos de cordura y/o credibilidad. Que se mueran los ingenuos, los echamos a los leones para que los más primitivos disfruten de la masacre. Estoy convencida de que se puede ser inteligente e incluso fuerte y seguir siendo agradable.
No os parece que ya hay suficiente crueldad y des-humanización para encima ser groseros con nuestro entorno?? Ah si, ya sé, que como soy flower power me he vuelto gilipollas!. Para nada, más bien todo lo contrario, porque conozco bien lo que son las fisuras del alma, lo que es andar por ahí con el corazón apedazado, recomiendo a "mis" gentes un trato afable.
Andamos de puntillas, como queriendo pasar desapercibidos, hasta que alguien nos toca la moral, entonces se desatan nuestros rugidos más cafres, volviéndonos desagradables como para defender nuestra esencia. Qué equivocados estamos! Si la mejor manera es obviar a los cretinos y agradecerles que, por contraste, valoramos más a los que nos tratan bien, desde el cariño.
Asomada al balcó del mediterrani siento una sencilla armonía que ayuda a amabilizar mi presente, mi entorno, mi forma de respetar. Mi rostro se relaja y aparece una sonrisa suave (que marca mis profundas arrugas).
No os parece que ya hay suficiente crueldad y des-humanización para encima ser groseros con nuestro entorno?? Ah si, ya sé, que como soy flower power me he vuelto gilipollas!. Para nada, más bien todo lo contrario, porque conozco bien lo que son las fisuras del alma, lo que es andar por ahí con el corazón apedazado, recomiendo a "mis" gentes un trato afable.
Andamos de puntillas, como queriendo pasar desapercibidos, hasta que alguien nos toca la moral, entonces se desatan nuestros rugidos más cafres, volviéndonos desagradables como para defender nuestra esencia. Qué equivocados estamos! Si la mejor manera es obviar a los cretinos y agradecerles que, por contraste, valoramos más a los que nos tratan bien, desde el cariño.
Asomada al balcó del mediterrani siento una sencilla armonía que ayuda a amabilizar mi presente, mi entorno, mi forma de respetar. Mi rostro se relaja y aparece una sonrisa suave (que marca mis profundas arrugas).
Sabéis que significa la palabra amable?:
"digno y meritorio de ser amado".
